Bienvenidos a Welcome
Laura Fernández
Elipsis
Tapa blanda
283 páginas | 2008
Continúo mi avance por las novelas de Laura Fernández, y tras la divertida novela de La chica zombie, me adentro en las calles de Welcome para descubrir a unos habitantes de lo más peculiares.
La trama se sitúa temporalmente tras un terrible suceso en la ciudad de Welcome. Una nave se ha estrellado en un centro comercial (en uno de los muchos que hay), terminando con la vida de más de mil personas. Y ante la imposibilidad de una explicación a tal suceso, hay quienes han ocultado la "verdad". Políticos y periodistas trabajan para hacer llegar a la población su realidad: que se trata de publicidad para un nuevo programa de televisión, los fallecidos son actores que en ese momento se encuentran dentro de la nave, y una vez que el programa comiencen, todo saldrá a la luz. Por fortuna, hay quienes no creen esta historia, y continúan investigando los hechos para descubrir la verdad y darla a conocer.
La tragedia no parece afectar en exceso a la población. La historia del programa de televisión tiene sentido, y no el hecho de que una nave de desconocida haya llegado a su ciudad. Y es que para los habitantes de Welcome no hay nada más allá de los límites de su ciudad.
Repasemos a algunos de sus ilustres habitantes. El alcalde, Claudio Arden, a quien solo le preocupa su puesto, y vive pendiente de encuestas y de que su posición no se vea afectada por nada de lo que suceda en Welcome; Rico, mejor conocido como Dios, empresario dueño de medio Welcome y quien en realidad reina en el lugar; Rondy Rondy, un famoso escritor desaparecido y de cuya muerte se culpa a su guardaespaldas; Anita Velasco, cantante de un único éxito, que suena una y otra vez en la ciudad y se ha convertido en el himno de ésta; el sinfín de periodistas como Ginger Ale, Amanda Arden, Charlie Corn, Fred Ladillo, Rita Mántel, Arto México, Walken Rambo... si, sus nombres ya nos dan pistas sobre sus personalidades.
La infinidad de personajes darán ritmo a la novela, y nos trasmitirán cómo es el día a día en Welcome, presentando diversidad de historias en las que los habitantes están sumergidos. Y es que la vida sigue incluso cuando una nave extraterrestre se estrella en un centro comercial. Celos, conquistas, nuevas oportunidades, cada uno de los personajes se encuentra viviendo su propia lucha... todo narrado con un toque de humor, pues la mayoría de personajes hace cosas demasiado estúpidas.
He extrañado el estilo de narrar de Laura Fernández que tanto me gustó en La chica zombie. Aunque aquí también hay onomatopeyas, su utilización parece más forzada (y eso que en la otra novela su uso es mayor).
En cuanto a la edición, con la cantidad de personajes e historias que hay en la novela, hubiera sido genial contar con saltos de línea cuando la narración de una trama cambia a otra. Era inquietante estar leyendo un diálogo entre los periodistas de la revista, y una línea después descubrías tras leer esa línea que la trama había cambiado y ahora te encontrabas leyendo lo que estaba sucediendo en la comisaría, peluquería, etc. Un poco confuso, y dando una sensación de ir deambulando de un lado a otro sin sentido.
¡Connerland me espera!
La infinidad de personajes darán ritmo a la novela, y nos trasmitirán cómo es el día a día en Welcome, presentando diversidad de historias en las que los habitantes están sumergidos. Y es que la vida sigue incluso cuando una nave extraterrestre se estrella en un centro comercial. Celos, conquistas, nuevas oportunidades, cada uno de los personajes se encuentra viviendo su propia lucha... todo narrado con un toque de humor, pues la mayoría de personajes hace cosas demasiado estúpidas.
He extrañado el estilo de narrar de Laura Fernández que tanto me gustó en La chica zombie. Aunque aquí también hay onomatopeyas, su utilización parece más forzada (y eso que en la otra novela su uso es mayor).
En cuanto a la edición, con la cantidad de personajes e historias que hay en la novela, hubiera sido genial contar con saltos de línea cuando la narración de una trama cambia a otra. Era inquietante estar leyendo un diálogo entre los periodistas de la revista, y una línea después descubrías tras leer esa línea que la trama había cambiado y ahora te encontrabas leyendo lo que estaba sucediendo en la comisaría, peluquería, etc. Un poco confuso, y dando una sensación de ir deambulando de un lado a otro sin sentido.
¡Connerland me espera!
Yo me voy a estrenar con ella en Connerland, pero tras tanto meternosla en la cabeza Bandinelli, tengo ganas de ver que tal :)
ResponderEliminarConnerland caerá pronto. Es una autora cuya escritura me resulta ligera así que para estos días de calor y piscina, recomendable :D
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