Luna. Luna de lobos (Luna. Wolf moon)
Ian McDonald (Traducción de José Heisenberg)
Luna #2
Ediciones B | Nova
Tapa blanda | Ebook
396 páginas | 2017
Segunda novela de la trilogía de Ian McDonald, Luna, donde cinco familias continúan luchando por dominar la economía del lugar, situándose en una posición superior al resto de Dragones.
Para quien no haya leído aún Luna nueva, recomiendo guardar esta entrada y regresar tras su lectura (y para los indecisos, también recomiendo leer la primera reseña ¡y que os anime a enfrentaros a la novela!), pues debido a los acontecimientos que tienen lugar en la primera novela, es complicado no revelar información de sucesos que afectan en el desarrollo de la historia en Luna de lobos. En otras palabras, escribiré sobre el final de la primera novela, destripando lo que sucede.
Año y medio después de la caída de los Corta, los supervivientes atraviesan sus peores momentos, intentando superar las muertes de sus seres queridos, encontrar su lugar en el mundo, y cómo reponerse a ver todo su hogar destruido. Los miembros de la tercera generación se encuentran a salvo. Robson, quien en el pasado tuvo un contrato matrimonial con un Mackenzie, en la actualidad ha sido adoptado (en realidad lo único que les interesa a los Mackenzie es tenerlo bajo su control) por uno de los hijos del Dragón Robert Mackenzie. Lucasinho (quien sigue realizando tartas y dando rienda suelta a sus pasiones) y Luna se encuentran junto a los Asamoah, después de que Lucasinho hiciera uso del pendiente que Abena le entregó tiempo atrás.
Ariel y Wagner sobrevivieron, pero ninguno de ellos se hace cargo de sus sobrinos ni intentan recuperar Corta Helio. Ariel pasa sus días bebiendo y trabajando como abogada en casos sin gran relevancia, mientras Marina cuida de ella. Wagner, continúa alejado de los suyos, viviendo con su manada y trabajando con su equipo de cristaleros. Todo parece indicar que estamos ante el fin de la supremacía de los Corta, no solo porque son los Mackenzie quienes ahora usurpan su lugar, sino porque ninguno de los supervivientes parece interesado en recuperar su lugar (los adultos han sido duramente castigados, y los jóvenes están más interesados en sus amoríos o pasiones y están demasiado asustados para luchar contra la Luna).
La trama dedica más atención al resto de familias, como los Sun y los Asamoah, que en la primera novela no tuvieron tanto protagonismo. Sun nui shi es un personaje muy interesante, juega con la posición que le da todo el conocimiento que ha obtenido durante sus años, utilizándolos para colocar al resto de familias en el lugar que a ella y su familia más les beneficia. Por el momento utiliza sus cartas en las sombras, mientras deja que los Dragones con mayor posición (por el éxito de sus compañías), como los Corta y los Mackenzie, se despedacen entre ellos.
Es una obra más coral, con un gran número de personajes narrando su historia. Al conocer a la mayoría de estos personajes no es complicado seguir las distintas tramas, pero en ocasiones puede desconectar al lector al saltar de un personaje a otro cuando la historia está en un momento interesante.
Esperaba una novela de enlace entre el gran suceso del primer libro y que nos preparara de cara al desenlace de la trilogía. Esperaba encontrar cómo volvían a posicionarse todos los personajes. Pero he encontrado mucho más. Y es que desde los primeros capítulos, Ian McDonald nos sorprende con nuevos eventos para mostrarnos que realmente que en la Luna hay mil maneras de morir.
También hay momentos para la esperanza. Entre guerras, traiciones, muertes... Luna nos muestra la cara amable del lugar. Aunque es consciente de todo lo que está sucediendo, permanece fuerte e ilusionada. Sus escenas con Lucasihno son tiernas y las he agradecido mucho. Incluso disfruté con las cuatro páginas hablando de tartas y su sociología, será porque me encanta la repostería. Aunque la guinda en esta escena vuelve a ponerla Luna.
Me ha decepcionado la trama de cierto personaje. Como afirmaba Dorothy en el Mago de Oz, "no hay lugar como el hogar" y en esta novela tenemos a dos personajes intentando regresar a su hogar. Esperaba más de una de las tramas (de la otra, nada), durante una parte de la novela se desarrolla en otro punto temporal respecto al resto de eventos, y tiene unos giros que me han parecido forzados. Finalmente se une a la trama central con un descubrimiento que volvió a dejarme alucinada, y todo hace indicar que tendrá mucho protagonismo en el desenlace de la trilogía.
Todos los personajes permanecen en la posición adecuada para comenzar la batalla final. El último libro promete ser apasionante. ¡Demasiados interesados e interesadas en hacerse con el control de la Luna!
Esta vez no coincidimos, aunque ya he visto que soy un poco la oveja negra XD Mi problema era que había varias tramas que me interesaban menos que cero. La de Lucasinho, la de Lucas y la de Robson / Wagner me tenían embelesado. El resto, para nada. Aparte de que salían y desaparecían de escena en menos que canta un gallo. Para mi ha sido lo mismo que la primera, es más, repite estructura y todo. Pero aún así, es buena, es entretenida y ese mundo mola mucho. Además, todo queda situado para el capítulo final.
ResponderEliminar¡Alguna vez tenía que pasar! :p
EliminarLa que menos me interesaba era la de Marina, por eso digo que me daba igual lo que le pasara vamos, como si se iba a la Tierra y no volvía a aparecer en el primer capítulo. ¡A ver cómo cierra la trilogía porque por ahora el último libro tiene buena pinta tal y como quedó la trama!
Besos!